Ser una víctima emocional

Ser una víctima emocional

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734

Resumen:
Ninguno de nosotros nos gusta pensar en nosotros mismos como víctimas. El término "víctima" trae a la mente una imagen patética de una persona que es impotente. Por lo tanto, viene como una sorpresa para la mayoría de nosotros nos demos cuenta de cómo a menudo nos dejamos de ser víctimas emocionales. Después de haber aconsejado a los individuos, parejas, familias y socios de negocios de 35 años, sé que muchos de nosotros somos víctimas de la mayor parte del tiempo sin darse cuenta.


Palabras clave:
la comunicación, la ira, la autoayuda, la superación personal, el coaching


Cuerpo del artículo:
Ninguno de nosotros nos gusta pensar en nosotros mismos como víctimas. El término "víctima" trae a la mente una imagen patética de una persona que es impotente. Por lo tanto, viene como una sorpresa para la mayoría de nosotros nos demos cuenta de cómo a menudo nos dejamos de ser víctimas emocionales. Después de haber aconsejado a los individuos, parejas, familias y socios de negocios de 35 años, sé que muchos de nosotros somos víctimas de la mayor parte del tiempo sin darse cuenta.

Hemos de ser víctimas en cualquier momento que se dé a otra persona el poder de definir nuestro valor. Hemos de ser víctimas en cualquier momento que se haga la aprobación, el sexo, las cosas, una sustancia o una actividad responsable de nuestros sentimientos de felicidad y amabilidad. Hemos de ser víctimas en cualquier momento que se culpe a otros por nuestros sentimientos de miedo, ira, dolor, soledad, los celos, la decepción, y así sucesivamente. Cada vez que elegimos para definirnos en el exterior, estamos lejos de poder entregar a los demás y entonces se sienten controlados por sus opciones.

Cuando elegimos definimos a nosotros mismos internamente a través de nuestra conexión con nuestra guía espiritual, nos adentramos en el poder personal y la responsabilidad personal. En el momento en que sinceramente quiere aprender acerca de nuestro valor intrínseco y qué comportamiento es en nuestro mayor bien, y le pedimos Espíritu, recibiremos respuestas. La mayoría de las personas no se dan cuenta de lo fácil que es recibir respuestas de una fuente espiritual. La respuesta aparecerá en su mente en palabras o imágenes, o usted experimentará las respuestas a través de sus sentimientos, cuando su deseo sincero es aprender.

Siempre tenemos dos opciones: podemos tratar de encontrar la felicidad, la paz, la seguridad, la amabilidad y valor a través de personas, cosas, actividades y sustancias, o podemos sentir gozo, paz, seguro, seguro, amable y digno a través de la conexión con una fuente espiritual de amor y compasión - teniendo cuidado amoroso de nosotros mismos y amar a otros.

Cada vez que elegimos para encontrar nuestra felicidad y la seguridad a través de otros, entonces tenemos que tratar de controlar que nos den lo que queremos. Luego, cuando no vienen a través de nosotros en la forma en que esperaba que, nos sentimos víctimas de sus decisiones.

Aquí está un ejemplo: Don y Joyce se encuentran en una lucha de poder continua sobre cómo manejar a sus hijos. Joyce tiende a ser autoritario, mientras que don es bastante permisiva. Cuando Joyce se frustra con la crianza de los hijos de Don, que en general, le grita a él acerca de su permisividad. Don menudo escucha a despotricar Joyce y rave en él. A veces se prolonga por más de una hora y él sólo escucha. Luego, cuando se trata de hablar con ella, ella se niega a escuchar. No se siente víctima, quejándose de Joyce le grita a él y se niega a escuchar a él.

Cuando le pregunté a don en una sesión de asesoramiento con él por qué él se sienta y escucha a Joyce, afirmó que espera que si escuchaba a ella le escuchaba. Le pregunté si alguna vez se escucha en estos conflictos, y él respondió: "No."

"¿Por qué necesitan a escuchar a usted?"

"Quiero explicarle por qué hice lo que hice con los niños".

"¿Por qué es necesario explicar a ella?"

"Así que no se enojará conmigo."

No permite que lo gritó por Joyce como su manera de tratar de controlar Joyce, con la esperanza de lograr que se apruebe de él. Luego trató de explicar a un mayor control de cómo se siente acerca de él. Cuando no se escucha, se siente víctima de gritar, culpando de ella por ser tan enojado, persona que la controla.

Si don estaban dispuestos a asumir la responsabilidad de la aprobación de sí mismo a través de su relación con su Poder Superior, que no quiso escuchar a Joyce cuando estaba gritándole a él. En cambio, se fijaría un límite contra el que gritó, diciendo que él escuchaba a su sólo cuando le habló con respeto y sólo cuando estaba abierto a aprender con él. Pero mientras ella tiene que aprobar lo que él se sienta seguro y digno, no va a establecer este límite. Hasta que se abre al don de su guía espiritual para su seguridad y el valor, en lugar de entregar este trabajo a Joyce, que será víctima de su comportamiento poco amable.

Asumir la responsabilidad de nuestros propios sentimientos de valía y capacidad de amar a través del desarrollo de nuestra conexión espiritual, en lugar de dar ese trabajo a otros, nos lleva a ser víctimas y en el poder personal.